El día comienza en algún lugar de La Mancha. Quijote está sentado junto a Sancho tomando una buena bebida. Una cerveza. Ambos ríen y disfrutan del momento. En eso, Quijote le habla a su escudero sobre Dulcinea.
“Mi Dulcinea- suspira- Eres la mujer más bella y perfecta que jamás habéis podido existir”
Sancho, sin embargo, sabe de quién le habla su señor que es nada más y nada menos una moza labradora de La Mancha de nombre Aldonza Lorenzo. Pero en la cabeza de Quijote es designada como “Dulcinea del Toboso”. Quijote tenía una idealización de una mujer que solo podía existir en su cabeza, pero Sancho conocía exactamente a quien se refería Quijote cuando le hablaba de ella.
Pero es que el amor es así, nos hace vivir en un mundo color de rosa, lleno de parajes idílicos, donde pensamos que todo es perfecto y armonioso, sin muchas veces ver la realidad tal y como es. Hombres que idealizan mujeres, mujeres que idealizamos hombres, y cuando nos llegamos a conocer los unos a los otros como realmente somos, nos llevamos “decepciones” o “desilusiones”. ¿Decepciones?, ¿Desilusiones? ¿En serio? Desde mi punto personal de vista yo diría que a la persona a la cual “Se quiere” no tiene la culpa de haber “decepcionado” al o la otra. No. Siempre es uno mismo el que se decepciona de uno mismo. ¿Por qué nuestro Corazón es así? Se crea sus ideas, y cuando le hacemos ver la realidad no le parece.
Como adolescentes que somos, no podemos evitar sentir el sentimiento del amor. Nosotras las chicas en especial, nos ilusionamos rápido e idealizamos a los hombres como queremos que sean, y luego si no son como nosotras creemos que eran, nos decepcionamos. Bueno, ¿Y qué culpa tienen los hombres de no cumplir nuestros caprichos?, han leído bien “Un capricho”. Querer cambiar a una persona, y que sea como tú quieres, es un capricho. Cuando de verdad se ama, se acepta a la persona tal y como es. Hay una delgada línea que separa el realismo del idealismo y constantemente tendemos a romperla.
Hay quien dice que el que no haya amado con locura no ha amado. Pues y quizá y esto tenga algo de razón, pero no lo sé. Y regresemos al ejemplo de Quijote. El se enamoro con locura, si, pero de una Dulcinea que solo podía existir en su cabeza. Y no de una Aldonza que existía en la realidad. El idealismo y el realismo se encontraron una sola, pero como siempre, el realismo vence. La mejor solución para llevar el amor “en paz” es aceptar el amor de la realidad, y no el de la “idealización”. Y aunque la realidad sea una vil porquería, siempre se puede ser feliz. Quien busca, encuentra.
“Un mundo ideal no es aquel que imaginamos, es aquel que volvemos realidad.”
D.A. Enya.
Aquí un pequeño espacio hecho por mí. Podría decirse que es un diario, pero no lo es. Muchas cosas de las que aquí escribo son mis más profundos pensamientos, dudas dentro de mí, que necesitan salir a flote y buscar respuestas. Los invito a navegar en este espacio, y quizá encontrar algo de su agrado. Gracias por su visita :)
Solo una chica más...
¡Bienvenidos sean a este Blogg! Espero que sea de su agrado n.n
Sólo una chica más en este mundo soy, solo un mundo más para este universo inmenso, un universo para una chica :)
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